Unas palabras y recopilaciones sobre la Crisis de Ucrania
y las reacciones de Occidente.
¿Una política Rusa de protección a sus nacionales?….o una
realidad y negativa al distanciamiento de un país fronterizo, cercano y amigo
de Rusia desde hace más de 300 años…un recordatorio a la crisis Georgiana del
2008
Al igual que la crisis de Georgia
en 2008, la crisis de Ucrania y, sobre todo, la cuasi anexión de Crimea a
Rusia, podría tener consecuencias en una reivindicación hacia la UE y a la Organización
para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) como marcos para la prevención
y resolución de conflictos en la Europa no comunitaria. En el caso de la OSCE,
es una opción llena de cuestionamientos ya que Rusia forma parte de la OSCE y,
eso puede suponer su bloqueo y o negativa a un posible despliegue de observadores
OSCE y/o la reivindicación del control de estos por parte de Rusia. En el caso
de Georgia, al ser Rusia parte del conflicto, supuso la discontinuidad de la
Misión OSCE en Georgia que llevaba en el terreno desde 1992. Rusia también consiguió bloquear la renovación
del mandato de la Misión de la ONU in situ (en Abjasia), UNOMIG (en el terreno
desde 1993), y que los observadores también salieran del país en el 2009.
Así la UE, con la Misión de observación, EUMM, establecida en septiembre de 2008, es la
única misión internacional en el terreno desempeñando labores de observación y
monitoreo de la situación en Georgia.
La OSCE ha tenido una misión en territorio ucraniano desde
1994, a partir de 1999, esta presencia se convirtió en una oficina de
coordinación de proyectos, OSCE Project Coordinator in Ukraine. En
cualquier caso, una posible misión OSCE desplegada con observadores internacionales,
junto con otros mecanismos OSCE, como el envío
de un número limitado de personal militar no armado a petición de
Ucrania, supondría poner en funcionamiento un instrumento claro de una
diplomacia de gestión de crisis, centrada en calmar las tensiones entre países
OSCE.
Pero el hecho estratégico esencial no tiene fácil arreglo y
así, Crimea podría pasar a engrosar la larga lista de conflictos latentes
heredados de la Guerra Fría, como son: Transnistria (Moldova), Osetia del Sur y
Abjasia (Georgia) o Nagorno-Karabaj (entre Armenia y Azerbaiyán). Conflictos
sin solución fácil a corto o medio plazo.